Cati Amores11. April 2025

Concienciados sobre la importancia de cuidar el medio ambiente y con ganas de más. Así acabaron la mañana de ayer los 263 alumnos de quinto y sexto de primaria de todos los centros educativos de Campos que participaron de las actividades organizadas en el marco Energy Ariya Challenge 2025: talleres diversos y creativos para despertar la reflexión y aprender de manera divertida sobre movilidad sostenible, reciclaje o hábitos saludables. El Ajuntament de Campos se involucró activamente en la propuesta y destacaron el valor de este tipo de iniciativas.

Divididos en dos grupos, los centenares de participantes llenaron la plaza Ca’n Pere Ignasi de la localidad para pasar una mañana diferente.

Como suele ser habitual uno de los reclamos de la jornada fueron las bicicletas estáticas generadoras de energía. Los estudiantes pudieron conocer de primera mano como a través del movimiento podemos crear energía para actividades tan cotidianas como encender la luz o cargar el móvil, además de poner a prueba su capacidad física.

La alcaldesa de la localidad, Francisca Porquer, resaltó que «hace años que nos sumamos a esta propuesta porque nos parece fundamental poder ofrecer esta alternativa a nuestros estudiantes, pues les acerca al medio ambiente de forma dinámica y práctica y contribuye a que después cada uno ponga su granito de arena para cumplir con la Agenda 2030». Porquer predicó con el ejemplo y no dudó en subirse a la bici y, junto a las profesoras que acompañaban a los estudiantes y los gritos de ánimo de los alumnos, protagonizó uno de los momentos de la jornada.

Otra de las actividades del evento fue una charla de movilidad en la que se destacó la importancia de los desplazamientos sostenibles; con transporte público, bicicleta, a pie o en vehículos eléctricos, igual que los que se usan en todos los desplazamientos del reto Energy Ariya Challenge. Tras la explicación, los estudiantes se enfrentaron a un cuestionario que resultó todo un éxito y se convirtió en un momento de debate y competición entre ellos.

El Ajuntament campaner puso también iniciativa y montó su propia parada informativa. El técnico municipal de Medi Ambient acercó a los alumnos algunos de los proyectos en los que se invierten los recursos públicos en materia de sostenibilidad. En este sentido, la regidora de Educació, Carme Marín, explicó que «este año nos hemos centrado en que conozcan la ubicación de los puntos de recarga eléctrica que tenemos en el municipio y también cómo se abastecen, que evidentemente, es con la energía renovable de instalaciones solares».

Una gincana sobre reciclaje, en la que se debían lanzar diferentes objetos al contenedor que tocara o una área creativa fueron otras de las propuestas. Este año, los alumnos participantes, divididos en grupos de tres, se encargaron de diseñar el que será el logo del reto del próximo año. Entre todos los dibujos se elegirá uno, que será el que de color al reto de 2026 en la localidad. «Algo que funciona debe mantenerse y esperamos poder seguir sumándonos muchos más años», reconoció la alcaldesa.

Entre taller y taller, tuvieron tiempo de recargar energías para toda la mañana. Un pequeño avituallamiento con fruta km 0 y agua ofreció a los más pequeños una merienda saludable.

La Policía Local de Campos también tuvo su papel en la jornada. Uno de sus agentes acompañó a los alumnos y les enseñó uno de los vehículos eléctricos que usan para patrullar las calles. Los estudiantes pudieron comunicarse con otros policías, tocar la sirena y aprender un poco más sobre el trabajo policial, algo que sin duda generó mucha expectación. «Hay que agradecer mucho la labor y disposición de nuestra Policía que no ha dudado en participar de esta iniciativa», remarcó Porquer.

Después de todo el esfuerzo, también hubo recompensa. Todos los alumnos se llevaron a casa un plantel de tomàtiga de ramallet para continuar trabajando en casa actividades medioambientales y transmitir los valores aprendidos, porque aunque el detalle siempre gusta, el premio de este reto va un poco más allá. Todos coincidieron en señalar que había sido una jornada muy productiva. «Hemos disfrutado mucho de todas las propuestas y ahora podremos aplicarlas en nuestro día a día», explicaba una de las participantes. Esta idea la compartían desde el equipo de profesores. «Actividades como ésta complementan nuestro trabajo, además al ser talleres cortos y precisos consiguen atraer la atención de los estudiantes», matizaron.

Los colegios participantes en la jornada de Campos fueron el CEIP Fra Joan Ballester, el CEIP Nou de Campos y el CEIP Joan Veny i Clar.

Con las maletas más llenas que cuando llegaron, los estudiantes regresaron a las aulas con ganas de continuar aprendiendo sobre sostenibilidad y energía verde y pudieron poner cara a conceptos que trabajan en la escuela.

Todas las actividades llevadas a cabo en este reto son posibles gracias al Ajuntament de Campos, la Conselleria d’Empresa, Ocupació i Energia y Nissan Nigorra Baleares; así como a la colaboración de Fundación Saica, TBC, Viveros Can Juanico, Agromart y Cash & Carry Rotger.

Campos vivió ayer una nueva edición de esta experiencia sostenible que volvió a demostrar que, con la implicación de todos, un cambio es posible. «Trabajar la sostenibilidad desde las escuelas es clave para crear un buen futuro para todos», recordó la alcaldesa.